Juan Lobato hace acto de presencia en la Asamblea de Madrid tras dimitir como líder del PSOE-M
Jesús Celada ocupa el escaño como nuevo portavoz del Grupo Parlamentario
Los sindicatos se manifiestan contra el presupuesto para las universidades públicas
En segunda fila. A eso ha quedado reducido el papel de Juan Lobato en el pleno de la Asamblea de Madrid de este jueves, el primero que se celebra tras su dimisión como secretario general del PSOE-M y de la pérdida de todo poder o cargo orgánico que había adquirido en la organización socialista desde que se convirtió en su líder, tras ganar las elecciones primarias de 2021. Así se queda. Sentado justo detrás de quien, por ahora, le sustituye en la Portavocía del Grupo Parlamentario: Jesús Celada.
A poco tiempo de producirse esta escena captada por los objetivos de los fotógrafos, el liderazgo de la organización socialista en Madrid quedaba en manos del actual ministro de Transformación Digital y Función Pública, Óscar López. Es una decisión que fue confirmada por él mismo al presentar su candidatura oficial para convertirse en el próximo secretario general del PSOE-M, algo que logrará si es elegido en las elecciones primarias previstas para los sábados 11 y 18 de enero de 2025.
En ese probable caso, ejercerá la oposición a Ayuso, pero no desde la Asamblea. No podrá estar presente en los debates plenarios, pues carece de la condición de diputado necesaria para ocupar el escaño que hasta ahora le pertenece a Lobato, que tampoco ha renunciado a su acta en el Senado por designación autonómica.
Esta situación ha generado dudas entre los cronistas parlamentarios, que han mostrado su curiosidad por el futuro de la sección madrileña de los socialistas. En su primera rueda de prensa en la Asamblea de Madrid, Jesús Celada quiso aparentar una situación de unidad en su propio partido, al constatar el respeto de la gestora ante la decisión de Juan Lobato de acudir al pleno, y ante la candidatura de Óscar López, hasta ahora la única presentada. “Es la riqueza que tiene un partido con 145 años de historia”, ha sentenciado el nuevo portavoz parlamentario.
También ha recordado que “el proceso sigue abierto a cualquier persona que quiera presentar sus avales” para asumir el liderazgo, un recordatorio que ha aportado un matiz importante a la hora de interpretar el apoyo que el actual portavoz parlamentario ha mostrado López en su primera rueda de prensa. Por ahora, toca esperar a los próximos movimientos de Lobato y de su casa, el PSOE.
Los presupuestos y la Universidad Pública
Este ha sido el principal foco de interés de un debate que ha discurrido con la normalidad propia de una sesión plenaria de carácter ordinario. El punto de originalidad residió en el Proyecto de Ley de Presupuestos Generales diseñado por el Gobierno de Ayuso para el año 2025. Se trata de un borrador presupuestario planteado hace un mes, y que en el jueves se enfrentó a las enmiendas a la totalidad presentadas por los partidos que conforman la oposición: PSOE-M, Más Madrid y Vox.
El debate presupuestario fue simultáneo a los lemas que pregonaban estudiantes, profesores y sindicatos frente a la sede del parlamento regional, en el edificio de Entrevías. El motivo de la concentración convocada por CGT, CNT, Plaza y el Frente de Estudiantes fue exigir una mayor financiación para las universidades públicas por parte del ejecutivo madrileño, para “garantizar la calidad de la universidad pública”.
La concentración tuvo como principal blanco de críticas la reunión que mantuvo Isabel Díaz Ayuso con los rectores de las seis universidades públicas, que han denunciado la situación de “infrafinanciación crónica» que sufre el sistema universitario. La presidenta se comprometió a incrementar la partida hasta un 4,2%, el equivalente a 47 millones de euros, una cantidad “insuficiente” para los Consejos de Gobierno. Consideran que si se aplica esta escasa dotación presupuestaria, “se agravará la ya crítica situación económica” de las universidades públicas madrileñas.
Javier Moreno, catedrático de Historia del Pensamiento en la Universidad Complutense de Madrid, denuncia que “vive la situación de las aulas con mucha preocupación”, pues asegura que el profesorado “trabaja en condiciones penosas por el enorme deterioro de las instalaciones y de las condiciones de trabajo”. “Llevamos muchos años con un deterioro constante; ya basta”, afirmó.
Jorge Martín, militante de la asociación La Plaza, achaca parte de la responsabilidad a los propios órganos de gobierno de las universidades, al aceptar una “dotación insuficiente que no sirve para cubrir la ausencia de asignaturas, de profesorado y de calefacción”.
Las declaraciones de Alfonso Serrano, número dos del PP madrileño, no concuerdan con las quejas de las universidades, y de sus órganos de gobierno. Muestra, ante las preguntas de Infoactualidad, “la voluntad de la Comunidad de Madrid y de Ayuso de mejorar la financiación de la universidad”.
Es, precisamente, la reacción de los rectores lo que ha impulsado a los manifestantes del Frente de Estudiantes a situarse frente al edificio de Entrevías para gritar sus proclamas: “Ayuso culpable, rectores responsables”. Pablo Castro es una de las caras visibles de este sindicato estudiantil que se autoproclama como defensor de los trabajadores. Entre los gritos de sus compañeros, critica la actitud de las autoridades universitarias, que “defienden los intereses de las empresas y de los bancos, y no del estudiantado”. “Llevan años gobernando sobre facultades que se les cae encima”, sentenció.