Lidia Sánchez-Puebla, atleta profesional y médica: “Quiero seguir en el deporte para ir a los Juegos Olímpicos o para tener la satisfacción de haberlo intentarlo”
Con tan sólo nueve años, Lidia Sánchez-Puebla se inició en el mundo del atletismo en el colegio y, a medida que iba creciendo, competición tras competición, llegó a ser octava en puesto individual en el Campeonato del Mundo de Marcha por equipos de 20 kilómetros celebrado en Antalya, Turquía.
A sus 27 años, Lidia Sánchez-Puebla ha conseguido hacer realidad sus dos sueños: ser atleta profesional y médico.
A pesar de no tener ningún referente en el mundo sanitario dentro de su familia, Lidia decidió estudiar Medicina porque siempre le ha gustado ayudar a las personas e investigar cómo mejorar sus vidas. También veía que tenía potencial y, mezclando su pasión y sus habilidades académicas, se decantó por estudiar esta carrera. Pero esto no ha sido fácil para Lidia.
El primer año en la facultad, empezó también su especialización en el mundo de la marcha atlética, lo que le llevó a creer que no podía con todo. Al ser de Getafe, entrenaba en los campos del Centro de Alto Rendimiento de Madrid, lo cual le agobiaba a la hora de compaginar su vida deportiva y la académica. Pero, poco a poco, con organización y trabajo, siguió adelante con ambas cosas. Todo lo que conlleva ser profesional del deporte supone tener que dejar a un lado tu otra vida y, en el caso de Lidia, la medicina requería su tiempo también. Según asegura, fue difícil pero muy gratificante.
Hoy, cuando es investigadora predoctoral contratada en la Facultad de Medicina de la UCM, sus días como estudiante siguen rondando por su cabeza. No se olvida de la primera vez que realizó una disección. “Medicina es una carrera muy larga, con asignaturas muy complicadas y unas prácticas que, una vez entras, ya vas viendo a lo que te vas a dedicar, tocas todas las especialidades y es muy bonito”. Destaca las grandes amistades que realizó, siendo estas grandes referencias para ella.
“Medicina tiene unas prácticas con las que ya vas viendo a lo que te vas a dedicar, tocas todas las especialidades y es muy bonito”
Finalizó la carrera en 2020, a curso por año, y se organizó para dejar todas las prácticas para al final ya que así podía centrarse en los Juegos de Tokio, los cuales fueron pospuestos por la pandemia de la COVID-19. Fue entonces cuando decidió operarse de una lesión en el pie que llevaba cargando desde hacía unos meses para así estar lista una vez se volvieran a convocar los Juegos Olímpicos. Sus amigos de la carrera comenzaban con el MIR y ella decidió operarse y luchar por su sueño olímpico.
Pero el postoperatorio salió mal, no pudo estar lista para ir a los juegos 2020 y ese mismo año comenzó con el Máster en Investigación en Ciencias de la Visión recomendado por su mentor, el doctor Ramírez, y le surgió la ocasión de un contrato de investigación en la UCM. “Venía de épocas muy complicadas en el deporte y los ingresos eran casi inexistentes, lo que me hizo ver que era lo mejor”.
“Venía de épocas muy complicadas en el deporte y los ingresos eran casi inexistentes, lo que me hizo ver que hacer un máster era lo mejor”
Hoy en día, Lidia sigue compaginando la vida académica con la deportiva . En su trabajo le dan la flexibilidad necesaria para que pueda organizarse de la mejor manera y así poder compatibilizar con el deporte. Entrena tres horas por la mañana y vuelve a entrenar por la tarde, yendo a trabajar entre medias. El teletrabajo es algo que le facilita mucho las cosas ya que hay días que le resulta imposible llegar a todo.
En cuanto al deporte, este año ha sido, sin lugar a dudas, uno de los mejores. Ha conseguido el octavo puesto a nivel individual en el Campeonato del Mundo por equipos de 20 kilómetros en Antalya (Turquía) y alcanzó el bronce por equipos con la selección española. La federación todavía no ha sacado la lista de elegidos para los Juegos Olímpicos de París de este año y el nivel en España es muy alto en esta categoría, pero como ella destaca, “nunca se sabe lo que puede pasar”.
Hace unos años que, tras su lesión, ha vuelto a encontrar ilusión en el deporte y, a pesar de que la opción de retirarse este año estaba encima de la mesa, finalmente ha decidido seguir con su carrera deportiva profesional. “Me gustaría tomar esta oportunidad para que me lleve a donde me tenga que llevar, ya sean unos Juegos Olímpicos o quedarme con la satisfacción personal de haber hecho todo por llegar a lo máximo”. En un año y medio defenderá su tesis, con lo que las puertas del MIR volverán a abrirse.
Dentro de esta compleja organización para lograr sus sueños, Lidia ha encontrado en sus compañeros de entrenamientos una referencia. Habla de Laura Luengo, campeona de España de Media Maratón y compañera y amiga: “Su crecimiento a lo largo de los años hace que sea un gran ejemplo para mí”.
“El sacrificio ha sido clave, pero mi mentalidad era clara: iba a por todas”
Ella ha sido su gran aliada en esta carrera de fondo que es luchar por sacar adelante la carrera de medicina y dar lo máximo para ser atleta profesional. “El sacrificio ha sido clave, pero mi mentalidad era clara: iba a por todas”. Para los jóvenes que se encuentran en una situación parecida, Lidia destaca la importancia de la constancia, la organización y el tener todo muy claro para poder llegar a todo lo que te propones.