La nueva ley de protección de la infancia se aprueba en una Asamblea dividida tras el 8M
La Asamblea de Madrid, con los votos a favor del PP y de Vox y la abstención de la oposición, aprobó este jueves renovar la actual ley de la infancia, que data de 1995. La nueva Ley de Derechos, Garantías y Protección Integral de la Infancia y la Adolescencia incluye sanciones de hasta 30.000 euros para los casos graves, como no denunciar la violencia contra menores, no procurar su asistencia a clase en las etapas obligatorias o publicar sus datos personales.
Mónica García justificó la abstención del grupo parlamentario Más Madrid argumentando que la nueva ley “es insuficiente porque no recoge las demandas de los niños y niñas”. En declaraciones a este medio, García resaltó la situación de desprotección de los menores de tres años que se encuentran institucionalizados. Según la portavoz de la oposición, la ley nacional de Infancia establece que estos menores no pueden vivir en centros tutelados y la nueva ley autonómica “no ofrece garantías” para solucionar dicho problema. “Una comunidad rica debería garantizar la protección de su colectivo más vulnerable”, sentenció.
Déficit del Ayuntamiento
Díaz Ayuso acusó a Podemos de “dividir el feminismo y parasitarlo con campañas bochornosas”. La presidenta de la comunidad, que no acudió a la manifestación del 8 de marzo, defendió su compromiso con la igualdad: “Yo trabajo por todas las mujeres de la Comunidad de Madrid. Ustedes hacen anuncios diciéndonos hasta cómo tenemos que comportarnos en la cama.” Por su parte, Alejandra Jacinto, portavoz de Unidas Podemos, lamentó: “Cuando Ayuso destroza la sanidad pública, quienes nos lo echamos a la espalda somos las mujeres”.
La política municipal y nacional estuvieron también presentes en la sesión de la Asamblea. Mónica García criticó que el Ayuntamiento de Madrid haya tenido un déficit económico por primera vez en doce años: “No sabemos en qué se ha gastado el dinero Almeida, pues no ha hecho nada excepto talar árboles y dar comisiones”. Por su parte, Vox guardó silencio ante las diferencias ideológicas con su candidato de la moción de censura, Ramón Tamames, a quien Díaz Ayuso calificó de “altamente peliagudo y polémico” tras aludir a sus declaraciones sobre los niños con síndrome de Down.
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Imagen de portada: Alejandra Jacinto portavoz de Unidas Podemos en la Asamblea de Madrid. (Fotografía: Lucía Cívor)
