«Se tiene que morir mucha gente»: La primera novela de Victoria Martín
La cómica y guionista Victoria Martín, copresentadora del pódcast Estirando el chicle, presentó el pasado 19 de octubre su primer libro, titulado Se tiene que morir mucha gente. En el acto, que se celebró en el Pequeño Teatro de Gran Vía, estuvo acompañada por Carolina Iglesias, copresentadora del pódcast que las ha hecho ganadoras de dos Premios Ondas.
La novela se empezó a gestar en abril de 2020, cuando Victoria Martín no era un personaje público tan conocido como lo es hoy. La novela se centra la historia de tres amigas adultas que llevan juntas desde la infancia. El conflicto interno de los personajes aparece cuando se dan cuenta de que ya no tienen nada en común. Ahora han crecido y han cambiado, pero aun así siguen siendo amigas. La escritora explicó que “muchas veces se piensa que al no coincidir en tantas cosas ya no merece la pena seguir en esa amistad”, pero la autora quiere apartar esa idea y contar una historia en la que el amor entre ellas prevalece, independientemente de cómo hayan evolucionado como mujeres adultas. El personaje principal se llama Bárbara (como una de las amigas de la autora), y las tres amigas son similares a Martín en algunos aspectos.
La cómica explicó que el proceso de escritura “fue muy duro”, ya que el proyecto inicial era crear una serie. Pero la idea fue rechazada por varias productoras y Martín decidió convertirlo en un libro. Confesó que esta transformación no fue fácil; tanto es así, que borró el guion entero antes de empezar a centrarse en la novela.
En la novela también aparecen personajes antagonistas, a los que Victoria decidió no darles ningún nombre. Elos que destaca “El Camisetas”, a quien describe como “el típico hombre hetero que se pinta las uñas y va de feminista y luego resulta ser un cabrón”. Ella describió al libro como una forma de meterse con el capitalismo y el patriarcado, por lo que este personaje representa a esas personas que fingen creer en la igualdad o la inclusión, pero que luego no son capaces de estar a la altura de esos valores.
