El colegio San Gabriel de Madrid acoge la primera Feria de Científicos y divulgadores

El objetivo es fomentar hábitos saludables entre los adolescentes 

El colegio madrileño de San Gabriel fue el escenario de la primera Feria de “Científicos y Divulgadores” (FCT-22-17969). Financiada por la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología en colaboración con el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, este evento organizado por el Instituto de Ciencia y Tecnología de Alimentos y Nutrición (ICTAN-CSIC) tuvo como objetivo principal promover hábitos alimenticios saludables entre los jóvenes.

Organizada por estudiantes de cuarto de la ESO, primero y segundo de Bachillerato, la feria contó con diversos stands dedicados a la divulgación científica sobre nutrición y alimentación. Bajo la supervisión de Marta Mesías, investigadora del ICTAN, los estudiantes recibieron el apoyo necesario para llevar a cabo esta iniciativa.

La actividad se dividió en dos partes: en primer lugar, los estudiantes visitaron el ICTAN para aprender de investigadores expertos sobre temas como la reducción del consumo de azúcar en las bebidas, la importancia de la fibra en la dieta y la adopción de hábitos nutricionales saludables. Después, los alumnos aplicaron lo aprendido mediante la realización de talleres en su instituto, donde produjeron infografías, pósteres y vídeos educativos para concienciar a sus compañeros sobre la importancia de una alimentación equilibrada. Además de abordar temas generales sobre hábitos saludables, los estudiantes profundizaron en áreas específicas en sus talleres como la acrilamida, el chocolate saludable, la fibra y el contenido de azúcar en las bebidas.

Nada más acceder al recinto de la feria, lo primero que podía verse era un stand con varios platos en los que había patatas fritas, rebanadas de pan y croquetas: era el espacio dedicado a la acrilamida, una sustancia química que se forma naturalmente en alimentos ricos en almidón durante procesos de cocinado a altas temperaturas. Las autoras de este stand, Verónica Urdiales, Izarbe Gómez y María Simón, explicaron cómo la acrilamida puede aumentar el riesgo de cáncer y ofrecieron consejos prácticos para reducir su formación en diferentes alimentos.

En otro rincón de la feria, Laura García y Lucía Asenjo plantearon la pregunta «¿Existe el chocolate saludable?» destacando los beneficios del cacao y los posibles efectos positivos en la salud gracias a sus antioxidantes naturales. A través de esta exposición, los estudiantes aprendieron a distinguir entre el chocolate y el cacao, promoviendo una elección consciente en su consumo.

El stand dedicado a la fibra, presentado por Alisson Borge, Noa Fernández y Sandra Guijo, resaltó la importancia de este componente en la dieta humana. Explicaron las diferencias entre la fibra soluble e insoluble y realizaron un proceso práctico para identificar la fibra soluble en cereales. Esta actividad permitió a los estudiantes comprender mejor la función de la fibra en la salud digestiva y metabólica.

María Martínez, Miriam Sánchez y Rodrigo García exploraron el contenido de azúcar en las bebidas, destacando los efectos adversos del consumo excesivo de azúcares libres en la salud. Además, informaron sobre la presencia de edulcorantes artificiales en las populares bebidas energéticas y sus posibles implicaciones para la salud.

En el taller «¿Lo que hago cada día influye en mi estado nutricional?», los alumnos Rafael García, Marcos Izquierdo y Héctor Jiménez exploraron la relación entre el estilo de vida y el estado nutricional. Destacaron la importancia de considerar variables como la dieta, la actividad física y otros hábitos en la evaluación de la salud global de una persona.

Por otro lado, Marta López y Micaela Suárez presentaron el stand «Análisis sensorial e información nutricional», centrado en la comprensión del etiquetado de alimentos y el sistema Nutri-score. Los estudiantes aprendieron a interpretar la información nutricional presente en las etiquetas de los alimentos y a utilizar esta información para tomar decisiones más saludables en su dieta diaria.

Además de estos talleres, la feria también abordó el problema del desperdicio de alimentos en un stand dedicado específicamente a este tema. Los estudiantes del colegio San Gabriel ofrecieron información sobre las causas y consecuencias del desperdicio de alimentos, así como consejos prácticos para reducirlo tanto a nivel individual como a través de la investigación científica.

Según Mesías, esta iniciativa proporcionó a los estudiantes una oportunidad única para aprender de manera práctica sobre nutrición y alimentación, así como para promover hábitos saludables entre sus compañeros. «Con este tipo de proyectos, los alumnos aprenden de una manera divertida y lucrativa lo importante que es cuidar la alimentación y conocer cosas como saber descifrar el etiquetado de un producto alimenticio que, en el día a día, ayuda a adquirir unos hábitos saludables«, señaló. 

La Feria de Científicos y Divulgadores no solo proporcionó a los estudiantes una plataforma para aprender sobre alimentación y nutrición, sino que con la combinación de stands informativos y talleres prácticos también promovió una reflexión sobre los hábitos alimenticios y su impacto en la salud, sentando las bases para una generación más consciente y comprometida con su bienestar desde una edad temprana.