El debate definitivo: reproches al actual rector por la mala gestión del PAS y por la falta de transparencia
El debate definitivo se celebró este miércoles en la Facultad de Ciencias de la Información para poner punto y final a los debates a ocho de estas elecciones a rector o rectora de la Complutense. Javier Arias, Esther del Campo, Matilde Carlón, María Castro, Joaquín Goyache, Josefa Isasi, Iñaqui López y Jesús Pérez Gil se volvieron a enfrentar en una sesión con cuatro bloques: personal de administración y servicios (PAS), personal docente de investigación permanente y no permanente (PDI), infraestructuras y políticas económicas y diagnóstico y propuestas estratégicas.
Uno de los bloques más delicados fue el dedicado al PAS, según todos los candidatos menos el actual rector, Joaquín Goyache, este grupo de la universidad es una gran tarea pendiente. Coincidían en la escasez de reconocimiento del personal, así como en la pérdida de plantilla. Josefa Isasi afirmó que “el acceso a estos puestos debe basarse en la igualdad, el mérito y la capacidad”. Matilde Carlón también mencionó el “mérito y la capacidad” y la existencia “de problemas que lastran” a este colectivo. Javier Arias señaló la “necesidad de identificar las carencias de cada centro para adaptarse a ellos” y mejorar así el funcionamiento, una idea que también señaló Iñaqui López, quien denunció “la excesiva carga de trabajo”. Esther del Campo se dirigió de forma directa a Goyache para reprocharle “la precariedad del PAS” y arremetió contra él, reclamando “unos procesos selectivos anuales limpios y transparentes”. Recogiendo las palabras del resto de candidatos, del Campo se dirigió directamente al rector: “Creo que si todos se lo estamos diciendo, será por algo”.
A este reclamo por la transparencia se unió Jesús Pérez Gil, que denunció “la absoluta falta de transparencia”, la necesidad de una “definición de los parámetros que dan acceso a los procesos formativos” y señaló que “la capacidad del PAS debe estar incentivada por la universidad”. Joaquín Goayache hizo referencia a la pandemia para defenderse de las carencias del PAS que denunciaban los otros siete candidatos: “Seguiremos implementando medidas. Nosotros hemos modificado estructuras que no estaban tratadas desde hacía mucho tiempo. La escuela de doctorado, por ejemplo, no tenía estructura. Hemos diseñado centenares de plazas”.
En el segundo bloque, dedicado al PDI, las medidas y los problemas se trataron sin mucha profundización. Los ocho reclamaron la importancia de fondos e inversión para este colectivo que está en una constante formación. Josefa Isasi recordó que en su programa no distinguía entre PDI permanente y no permanente porque, según aseguró, “todos tienen el mismo valor”. Matilde Carlón recordó la entrada de la nueva ley de educación, la LOSU, y la calificó como algo positivo para el PDI. Respecto a la LOSU también tuvo unas palabras Iñaqui López, quien lo considera una cuestión “a la que se tendrá que hacer frente”. Joaquín Goyache reconoció que se encontraba con una plantilla “muy envejecida” y aseguró: “Queremos establecer una carrera genérica con previsión de futuro”. Jesús Pérez Gil hizo referencia a la necesidad de reformar la universidad y lamentó la existencia de muchas barreras burocráticas para que los investigadores puedan acceder a sus proyectos. María Castro denunció que “no hay que mirar solo hacía una vía para contratar profesorado” y explicó que existían otras vías que debían valorarse. Esther del Campo reclamó la falta “de una visión estratégica” y “reconocimiento del personal docente no permanente”.
Sobre las infraestructuras, no se dejaron a un lado los reproches al actual rector para hablar de mejoras. Según Pérez Gil: “Hay que hacer una auditoría de espacios para saber de qué estructura partimos”. El resto de candidatos también se unieron a la reclamación de más estructuras en la universidad. Pero las críticas más repetidas hicieron referencia a la falta de financiación de la UCM, ante lo que Goayche respondió: “Hemos cumplido las partidas presupuestarias, se aprobaron las cuentas individuales en plaza, la primera universidad pública en hacerlo”. Todos reconocieron la dependencia de la partida presupuestaria de la Comunidad de Madrid, por lo que defendieron un compromiso para presionar a la comunidad y recibir más fondos. Para Iñaqui López: “La credibilidad es importante, no se puede negociar un modelo de financiación para gestionar seis universidades públicas”.
Pese a las diferencias entre unos y otros, en lo que todos coincidieron fue en la búsqueda de una Universidad Complutense más sostenible y autosuficiente.
