Iñaqui López Sánchez: “Hay que negociar el modelo de financiación con Comunidad, debemos defender lo que consideramos justo para nuestra universidad”

Iñaqui López Sánchez, catedrático de Organización de Empresas en la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales, se presenta como candidato por primera vez a las elecciones de rector de la Universidad Complutense de Madrid. López, que ya ha tenido experiencia en el rectorado pues fue vicerrector de Política Económica, participa en las próximas elecciones con su lema: “Tenemos que hablar” y asegura: “Ser rector de la universidad presencial más grande es para mí un motivo de orgullo”.

¿Cómo afronta esta candidatura a rector de la UCM?

Aunque es mi primera candidatura, ya he estado en otras campañas. La afronto con ilusión, responsabilidad, con sentido del deber y muchas ganas de poder ayudar a definir cuáles son los objetivos que tenemos que alcanzar y, sobre todo, cómo liderar el rumbo que debemos seguir toda la comunidad universitaria en los próximos años.

¿Por qué decidió presentarse a estas elecciones?

Porque creo que tenemos el conocimiento y la capacidad de gestión necesarios para ser una garantía de éxito dentro de la transversalidad y la diversidad que supone la UCM. Vamos a tener que negociar con muchos grupos y también con otros candidatos para poder llegar al rectorado.

¿Cuáles son los puntos clave de su programa que le podrían llevar a ser elegido el próximo día 21?

El propio programa es muy claro. Necesitamos cambiar la imagen de nuestra universidad con un plan integral de comunicación. Habrá que adaptarse a la nueva ley orgánica que entrará en vigor de forma inminente antes de la toma de posesión. Esto supone un gran consenso entre todas las fuerzas porque habrá que cambiar el modelo de gobernanza de la propia universidad. También es necesario negociar el modelo de financiación con la Comunidad de Madrid. Hay que defender lo que consideramos justo e identificar cuál es el mapa de nuestras titulaciones y los recursos con los que contamos. Estos serían los puntos más importantes que habría que abordar.

Por primera vez en 200 años de historia hay cuatro mujeres candidatas. ¿Qué le parece este impulso de las mujeres para liderar una de las universidades más importantes del mundo?

Me parece estupendo. Es algo que visibiliza de una forma natural las realidades que se viven en la sociedad, aunque es insólito que, de ocho candidatos, cuatro sean hombres y cuatro mujeres. Con independencia de que seamos mujeres u hombres, vamos a tener que negociar.

Muchas veces parecemos una simple variable: vamos a la facultad, entramos en clase, terminamos y no hay vida universitaria. Es  importante que el estudiante, desde el primer día, se sienta complutense

De toda su trayectoria profesional, ¿qué destacaría?

Una de los proyectos de los que más orgulloso me siento es de haber creado un grupo de investigación que me ha permitido conocer a personas de gran valía. Poder contribuir a esa formación es una de las cosas que más me satisfacen.

Desde el punto de vista profesional, destacaría cuando fui director del Departamento de Organización de Empresas, uno de los más grandes de mi campo. En ese momento, alcanzamos grandes acuerdos. Últimamente, como vicerrector de Política Económica, estoy satisfecho de que nadie pueda poner en duda las cuentas de la universidad estando en plena crisis.

¿Es quizás esto lo más arriesgado a lo que ha tenido que hacer frente en su carrera?

Yo creo que no, aunque ser rector de la universidad presencial más grande de España y una de las más reputadas a nivel internacional es una responsabilidad y, para mí, sería un motivo de orgullo. Recuerdo que cuando defendí mi tesis doctoral pensé que eso era un punto de inflexión en mi carrera. Pero la vida es un continuo y lo importante es que reconozcan el valor de tu trayectoria. Me gustaría que me respetaran por eso y no por el cargo que pudiera ocupar.

¿Cuál será la primera medida que tomará si es elegido rector?

Si hay segunda vuelta, al pasar dos candidatos de ocho, no representas a toda la comunidad, por lo que vas a necesitar negociar con el resto de candidatos. Si podemos lograr un consenso, habremos avanzado mucho. Tenemos que ver cómo ir consensuando las nuevas formas de gobernanza.

Si es elegido, seguramente tendrá que dejar de dar clase. ¿Qué echará de menos de la tarea docente?

Seguramente tenga que dejarlo, sobre todo las clases regladas, porque es muy difícil compaginarlo. Es cierto que pierdes una conexión, pero cuando hay buen ambiente entre el estudiante que quiere realmente aprender y el profesor que quiere transmitir, la docencia se echa de menos. Ser rector supone una dedicación a tiempo completo.

¿Qué papel cree que deben jugar los estudiantes en la universidad?

Un papel fundamental. Muchas veces parecemos una simple variable: vamos a la facultad, entramos en clase, terminamos y no hay vida universitaria. Es  importante que el estudiante, desde el primer día, se sienta complutense. Esa falta de vida universitaria es la que se debe cambiar, porque la universidad sin estudiantes no es nada, sobre todo la pública. Os preparamos para el mundo laboral, para que haber estudiado en la Complutense sea garantía de estar bien formado y preparado.

Viendo los pros y contras de la decisión de presentarse a las elecciones. ¿Qué le ha dicho su familia?

Para mí, la familia es muy importante. El tiempo es algo valioso y la campaña requiere mucha dedicación. Necesito el apoyo de la gente más cercana, de mi familia y mis amigos, necesito ese respaldo.

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Imagen destacada: Iñaqui López Sánchez candidato a rector 2023. (Fotografía: Juan José Arenas)